¿Qué demonios está pasando? Se cae un avión y muere un Secretario de Gobernación, ayer matan a 40 personas en Sinaloa, destruyen el Horroris Bar, mueren 4 buzos de la forma más irónica y ridícula, arrastrados, ahogados y sepultados como lo dijera Ítalo Calvino en aquél gran libro de Las Ciudades Invisibles, o que el mundo se está deteniendo.
Seguramente se está anunciando el fin del mundo, aunque hay que aguardar hasta que acabe el año y esperar –eso que se espera cada fin de año, por lo menos yo lo he esperado desde hace unos 5 años, que cuando me coma la última uva se destruya el mundo a la manera de Sodoma y Gomorra, por eso es importante el arrepentirse en los últimos segundos del año, para que en el juicio final no nos vaya tan mal-.
Ayer me enteré al leer el periódico, que de acuerdo al Servicio de Referencia Internacional de Rotación de la Tierra –cuantas cosas se han inventado- que el 31 de diciembre de este nuestro presente año -2008- a las 23h 59m 59s, se agregará un segundo más, que tiene el progresista nombre de “un-segundo-bisiesto-positivo”.
Sin duda, una gran solución a un gran problema, los relojes atómicos que nos señalarán la llegada del año nuevo marcara la insólita hora de: 23h 59m 60s, en lugar de la tradicional 23h 59m 59s. Pero hay que estar tranquilos, ya que este horario se aplicará en todos los usos horarios en los cuales se divide el mundo.
La razón de todo esto, es la desaceleración de la rotación de la tierra –contrario a lo que pensaba el romántico Leopardi, de que el mundo se ha vuelto tan liviano, que ahora gira sin cesar y cada vez más y más rápido-. Gradualmente, el día se ha vuelto, más largo, exactamente 1,7 milisegundos cada siglo –comprobado ante notario y con calculadora y cronómetro en mano-, principalmente debido a las fuerzas de marea de la –eterna enamorada de la tierra como Chateaubriand cantara a la bella Atalá- Luna.
Y de aquí las múltiples reflexiones, ¿qué importa un segundo más o uno menos? Pues sin duda, habrá muchos a quienes les parezca ridículo, habrá otros que justifiquen su vida en bajar un segundo o en aumentar un segundo. En el mismo periódico donde leí esta noticia, en la parte de los deportes venia una en donde Nicky Hayden –piloto de motocicleta- denuncia a su equipo, por darle una moto Honda que es un segundo más lenta, habría que considerar si comprar o no esa moto, ya que a donde vayas, llegarás un segundo tarde, y tambiés habría que decirle al tal Nicky, que el 31 de Diciembre no va a tener problema con eso del tiempo en su moto nueva, ya que a donde vaya, tendrá un segundo de ventaja.
Por nuestra parte, en lo que nos queda de este año, tenemos el tiempo a nuestro favor para hacer las cosas que queramos, todo lo que tú quieras ahora lo puedes hacer por más tiempo, dormir, jugar, leer, follar, brincar, estornudar, maldecir, en fin, lo que quieras, aunque sólo sea por un maldito segundo más.
0 comentarios:
Publicar un comentario